Descripción
Durante casi cuatro siglos la Iglesia -por medio de las órdenes religiosas o del clero secular- se encargó de educar a la América española. Aquella compleja institución y la Corona eran plenamente conscientes de la importancia de su empresa, pues implicaba la formación de las élites gobernantes, con principios ineludibles como la fidelidad a la doctrina cristiana, a la Iglesia y al rey, aunque al mismo tiempo se enseñaran habilidades necesarias para el gobierno y la explotación y adminsitración de recursos. La institución no descuidó tampoco la enseñanza de primeras letras incluso para las poblaciones indígenas, y extendió su influencia a la de quienes debían ajustarse a ese dominio.
Reviews
There are no reviews yet.